En el trading, es por todos sabido que se gana o se pierde, no hay un intermedio. Por ello, para evitar frustrarse en el recorrido es necesario saber hasta dónde puedo y quiero perder.
A nadie le gusta perder: Ni en un juego de video, en el casino, un trabajo e incluso en el trading. Pero esa posibilidad siempre está presente siempre, aunque no nos guste, aunque no pensemos, el riesgo va a estar.
Debemos aprender a convivir con ello.
No me refiero a que estemos pensando todo el tiempo que vamos a perder o que nos neguemos a invertir por miedo, sino a que encontremos la comodidad al perder. ¿A qué me refiero con esto? A que encontremos nuestro punto de inflexión, donde nos apriete el dedo.
¿Si tienes €10.000 para invertir, hasta dónde te permitirías perder por operación? Por ej. de ese importe invertimos €1.000 en una operación con la que esperamos un beneficio de €200. Nuestro objetivo es obtener casi ¼ más de lo puesto en juego. ¿Pero si perdemos? ¿Cuál es nuestro stop loss? No me refiero únicamente al que marcamos cuando abrimos sino al psicológico. ¿Hasta dónde nuestra conciencia nos va a dejar perder sin recriminarnos?
Repasemos: De €10.000 utilizamos €1.000 con el objetivo de €200. Si ganamos nos llevamos a nuestra cuenta €1.200, si perdemos nos quedamos con un saldo de €9.000.
¿No sentimos cómodos con esa pérdida? ¿Estamos dispuestos a perder un 10% de nuestro capital?
Estas preguntas son las que te tienes que hacer para encontrar la comodidad al perder.
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