Todos tenemos un nivel de riesgo mediante el cual nos sentimos moderadamente cómodos para operar con soltura, aun a pesar de la potencial pérdida. Por otro lado, ese mismo nivel de riesgo lo percibimos suficientemente relevante como para no tomar operaciones que no consideremos verdaderas oportunidades. Se trata de riesgo óptimo personal. Me permite operar con comodidad siguiendo mi estrategia inicial, pero no se trata de una cantidad de dinero depreciable para mí, por lo que tranquilidad y temor permanecen en equilibrio.
Conozco aspirantes a traders que han tratado de comenzar a operar con microlotes, sintiendo tal desprecio por la cantidad arriesgada que llevaban a cabo demasiadas operaciones. Interiormente sentían que les daba igual perder esa cantidad monetaria. En el otro extremo se encuentran los que comienzan con importes de riesgo/trade tan elevados que sus sentimientos golpean una y otra vez a cada tick que se mueve el precio, impidiéndoles pensar con objetividad, y lo que es peor, generándoles comportamientos erráticos.
La percepción del riesgo de cada cual es diferente, por lo que a efectos psíquicos (otra cuestión diferente son los económicos) no tiene sentido aseverar que con cada trade haya que arriesgar el 1%, el 2% ó el 0,50%. Cada cual ha de descubrirse.
Un planteamiento que puede servir a una mayoría es el de comenzar con importes de riesgo muy pequeños, estableciendo un objetivo a corto plazo que de alcanzarse, permita ir incrementando los niveles de riesgo rápidamente hasta donde uno se sienta cómodo. De ese modo, conforme acumulemos unas pocas ganancias nos sentiremos más cómodos con ese colchón, así como con la operativa exitosa que hayamos llevado a cabo.
Otro planteamiento añadido que puede ayudar es el de proyectar 20, 30 ó 40 operaciones, estableciendo diferentes porcentajes de acierto/fallo y beneficio o pérdida por cada operación. De ese modo podremos visualizar cómo quedaría nuestra situación en diferentes escenarios, y de ese modo valorar qué importe de pérdida nos parecería razonable asumir en el caso de una mala racha.
El propósito de todo esto será alcanzar y situarnos en nuestro nivel de riesgo óptimo personal tan pronto como nos sea posible. Pienso que se trata de una de las cuestiones prioritarias para ser capaces de gestionar nuestros comportamientos en el trading y las inversiones.
- Sumando puntos para tratar de ganar, por Jorge Labarta. - 9 febrero, 2016
- La estadística y la probabilidad como base de nuestra confianza, por Jorge Labarta. - 24 enero, 2016
- Trading, profesiones y aprendizaje, por Jorge Labarta - 16 diciembre, 2015
Deja una respuesta