En los últimos años se ha visto un inusual crecimiento del trading automático en nuestro país, tanto en el uso particular como en la comercialización de estrategias programadas. Y me refiero a nuestro país en concreto, porque en otros países con mercados más liberalizados y por qué no decirlo, mejor regulados, se realizan estas prácticas desde hace ya bastantes años. Es evidente que la mayor accesibilidad a los mercados financieros por parte de los particulares y el desarrollo de nuevas herramientas de software, han facilitado esta creciente tendencia al uso de este tipo de operativa para hacer trading. También es curioso que en España, esta tendencia esté llegando antes a los inversores particulares que a los institucionales, habiendo sido los impopulares (en nuestro país) Hedge Funds y las tesorerías de la gran banca de inversión los pioneros en este tipo de operativa.
¿Debemos pensar que el trading automático acabará sustituyendo al trading discrecional?
No necesariamente. Pueden ser perfectamente compatibles y a la vez complementarios. Los que ya hayáis investigado algo al respecto ya conoceréis las diferencias entre ambas formas de operar: el factor psicológico, la disciplina, la diversificación, las dificultades técnicas, etc. Además el trading discrecional siempre guardará esa carga emocional que nos dispara la adrenalina y que crea cierta adicción entre los que lo practicamos. Pero hay elementos de análisis que son de vital importancia en el trading y sin los cuales no deberíamos aventurarnos a invertir nuestro dinero sin antes haber hecho un profundo estudio. Me refiero a los backtest y el análisis de las estadísticas.
Una de las principales causas por las que muchos traders fracasan en su operativa es porque no han testeado correctamente su estrategia y en consecuencia no han adaptado la inversión a los riesgos de esta. Un trader discrecional podría hacer un backtest manual sobre un periodo muy limitado de tiempo y así poder tener una vaga idea de si su estrategia funciona o no. Pero no se tienen en cuenta multitud de factores y de escenarios que nos pueden hacer perder la cuenta en un par de operaciones.
Veamos un ejemplo:
Un trader hacer una backtest manual a su estrategia en un periodo reducido de tiempo (un año y medio) y tras el análisis de los resultados llega a la conclusión de que su estrategia es viable.
Con los resultado anteriores el trader se anima a invertir en esa estrategia y resulta en los siguientes 4 meses en real, el máximo drawdown se le dispara hasta casi duplicarse. Si el trader no ha seguido una correcta política de riesgos, lo más probable es que se hubiera cargado su cuenta en muy pocas operaciones.
Por desgracia, esta situación es más que frecuente, y si no se hace un completo estudio de la estrategia en la que vamos a invertir nuestro dinero en un periodo de tiempo suficientemente amplio, algo que es realmente costoso e impreciso si sólo hacemos trading discrecional, corremos el riesgo de perder todos nuestros ahorros y nuestras ilusiones.
Esto no es más que un pequeño anticipo de lo que queremos mostrar en esta sección, en la que analizaremos estrategias y otros aspectos teóricos y prácticos sobre los sistemas automáticos de trading y sus aplicaciones.
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Fractlr dice
Estoy completamente de acuerdo con usted. Desde hace tiempo me dedico al trading automático compatibilizado con manual, es decir entro en posición cuando el robot ya está dentro sea para seguirlo o para operar al contrario, pero siempre, siempre, siempre teniendo en cuenta el riesgo máximo que puedo asumir por operación, la avaricia rompe el saco, lo digo por experiencia.
Por otro lado me gustaría subrayar la enorme importancia que bajo mi punto de vista tienen:
A / El saber que es (escalper, tendencial…) y como opera (indicadores que usa, gestión de stoploss y takeprofit…)el robot, algo que a veces se hace muy difícil, lo reconozco.
B / La optimización del robot, siempre que se pueda, fundamental.
C / El análisis en profundidad de los resultados del Backtest y posteriormente del Forwardtest, antes de ponerlo en real.
Carlos Perez Atienza dice
Gracias por el comentario Fractlr,
Efectivamente, todo lo que comentas es cierto y al final son razonamientos que confluyen en un punto: «Conoce tu estrategia». Qué tipo sistema es, qué variables manejamos, cómo elegir los mejores valores para cada variable sin caer en una sobreoptimización que nos arruine la estrategia, qué resultados podemos esperar de nuestro robot a través del análisis de su backtest, etc.
En caso de tratarse de una estrategia de desarrollo propio, la cosa es más sencilla. Pero cuando usamos un robot ajeno, de tantos que circulan por la red, el tema se complica. Yo sería muy cauto a la hora de invertir en algo que no se como funciona, aún generando unos maravillosos resultados. Si alguno es programador o al menos es capaz de interpretar un código, lo primero que le recomendaría es que revisase dicho código (si este fuera accesible, claro), sacase las reglas del sistema y tratara de entender la estrategia que está programada. De otra forma, yo particularmente no creo que me jugara mi dinero ahí.
En próximas publicaciones trataremos de profundizar en todos estos puntos. Por supuesto se admiten sugerencias 😉
Un saludo,
Carlos